Quintana explica que han presentado cinco escritos por registro de entrada que son absolutamente necesarios para el municipio e importantes para los pueblos.
Ninguno de los cinco escritos ha sido contestado. Hemos llamado para saber en qué estado se encuentran y no nos saben decir nada ni darnos explicaciones. Esto es un descontrol.
Nos hemos visto obligados a llevar el caso del Ayuntamiento a la Diputación del Común, porque el año que viene vence el convenio del ARRUS, y si no se lleva a cabo la remodelación de las 80 viviendas previstas, el Ayuntamiento tendrá que devolver el dinero. Estos vecinos siguen viviendo en pésimas condiciones, y no queremos que se pierda esa inversión. Pero así nos va, denuncia Quintana.
José Manuel también cuestiona la lamentable gestión del estado de las calles y de los solares aledaños, que suponen un grave peligro para la integridad física de las personas, tanto por el deterioro de las aceras como por las posibles plagas que pueden surgir del abandono en el que se encuentran los solares, los parques, y las zonas deportivas, muchas de ellas deterioradas y sin terminar.
Incluso los propios vecinos han hecho una denuncia pública sobre la situación de abandono que sufren, y declaran sentirse preocupados por su seguridad debido a aceras inaccesibles, vegetación que crece sin control en muchas zonas del municipio y pueblos, así como la falta total de iluminación en diferentes barrios.
Además de todo lo anterior, mejorar estas condiciones supondría también mejorar la imagen de las entradas a los pueblos, por donde llegan muchas personas a conocerlos.
Otro requerimiento que expone el presidente es la necesidad de mejorar las conexiones de las guaguas con los pueblos y aumentar la frecuencia de los servicios y horarios, especialmente por el bien de los trabajadores y personas mayores que, en muchas ocasiones, se quedan fuera esperando media hora más por la siguiente guagua. No hay que olvidar que son los propios vecinos quienes sufren esta situación a diario.
No obstante, este grupo municipal no se ha hecho eco de nuestras propuestas ni ha buscado la mejor solución a los problemas del municipio. Nos parece una falta de respeto. La alcaldesa ha convertido el Ayuntamiento en su cortijo, pero seguiremos trabajando por la estabilidad y el bienestar de nuestros vecinos y vecinas, y por el bien del municipio, concluyó el presidente.
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